Deportes Doña Mencía apoya la II Campaña de Juego Limpio

El CTAAF estuvo presente en la resentación del Proyecto Juego limpio en Córdoba
La segunda campaña del proyecto tuvo su puesta de largo este jueves en el salón de actos de El Arcángel, de forma que el Córdoba CF y su Fundación mostraron también su apoyo a este “Quien juega limpio, gana”. El triunfo en ese camino hacia la erradicación total de conductas inapropiadas, mucho más si son violentas, en las categorías inferiores sólo puede ser posible por el conjunto. La idea quedó patente en un acto al que asistieron además del propio Pedro Benítez, el presidente del Comité Andaluz de Árbitros, Felipe Santos; el secretario de la Subdelegación del Gobierno, José Manuel de Siles; el delegado de Juventud y Deportes de la Diputación, Martín Torralbo; el vicepresidente de la Federación Andaluza de Fútbol, Pablo Lozano, y el presidente de la Delegación Cordobesa de este organismo, José Santigo Murillo; y el Jefe de Operaciones de Comandancia de la Guardia Civil de Córdoba, Fernando López. Tampoco faltaron representantes de los distintos clubes de la capital, así como de ex jugadores como Alfonso Espejo o Manuel Garrido e incluso el técnico del Córdoba, José Luis Oltra.
Todos compartieron el deseo de que cada vez sean menos necesarias iniciativas como ésta, de la que es pionera la Delegación de Árbitros de Fútbol de Córdoba, en el fútbol base. El objetivo no es otro que el buen desarrollo, tanto a nivel deportivo como personal, de los más pequeños y que estos se diviertan con la práctica deportiva. El reto no es sencillo a corto plazo, ni los progresos, que los hay, son flor de un día, pero todo resulta mucho más fácil con la participación también de los clubes. Precisamente ese hecho lo destacó Pedro Benítez, que explicó que la iniciativa busca más llegar a los padres que a los niños, ya que al final estos últimos saben disfrutar más allá del tiempo de partido. El delegado del colectivo arbitral andaluz en Córdoba marcó como meta “erradicar la violencia de los recintos deportivos”, lo cual es “tan sencillo como que el deporte es sólo deporte”. La fórmula tampoco es complicada: basta con suscribirse al Código de Ética Deportiva que en su día aprobara el Consejo de Europa y promover una estructura que permita el desarrollo de una cultura educativo-deportiva. Porque en un terreno de juego, sobre todo en escalafones inferiores, importan más los valores que los goles.
Fuente: RFAF